Las dietas repetidas y fracasadas pueden producir daños físicos en las personas que las siguen. Además, nos desarman anímicamente de cara a intentarlo otra vez. Veamos cuáles son las causas de estos fracasos y tratemos de eliminarlas.

Es muy frecuente iniciar una dieta para luego fracasar en ella, aunque hayamos tenido resultados al principio. ¿Por qué es tan frecuente este fracaso? Resumiendo la opinión de diversos expertos, como el Dr. Cabrerizo(jefe de la Unidad de Dietética del Hospital Clínico) y la Dra. Irene Bretón (médico adjunto de la Unidad de Nutrición del Hospital Gregorio Marañón de Madrid), las principales causas del fracaso de las dietas, son:

Principales causas del fracaso de las dietas. 

1. Que la dieta sea inadecuada. Recurrir a las “dietas milagro” que aparecen en revistas no especializadas o que nos recomendó nuestra vecina, es tentador (prometen grandes resultados con poco esfuerzo) pero no inteligente. Es casi seguro el fracaso a medio plazo, pues recuperaremos el peso que teníamos (a veces incluso más), y ponemos en riesgo nuestra salud.

2. Picotear. Si tenemos esa costumbre y no la eliminamos al seguir una dieta, lo único que conseguiremos será engordar. Tenlo claro.

3. Tomar alimentos que no sacian.
 A igualdad de calorías, los alimentos que no sacian nos harán sentir hambrientos antes, aumentando así la dificultad de seguir la dieta. ¿Cuáles crees tú que son esos alimentos? Pregúntamelo a info@saludalosacher.com

4. Saltarse comidas, en especial el desayuno, es una barbaridad
. Nutrimos incorrectamente nuestro organismo y provocamos una sensación de hambre que puede producir una ingesta excesiva en la siguiente comida.

5. No cuidar los aspectos psicológicos.
 Una dieta jamás debe venir impuesta por los demás (por ejemplo, ser consecuencia de un comentario de una amiga sobre nuestro tipo), sino que debemos iniciarla bajo el convencimiento propio de su conveniencia, sin estar sometidos a presión externa. Por otra parte, en ocasiones la ansiedad o la depresión pueden inducirnos a comer en exceso; en estos casos, lo primero es identificar las causas de estos trastornos psicológicos e intentar eliminarlas, pues pueden dificultar enormemente el cumplimiento de la dieta.

6. Ser demasiado ambiciosos.
 En general, lo recomendable es perder del 5 al 10% del peso en un plazo de tres a seis meses. Pero no más.

7. Seguir dietas no adaptadas.
 Lo que es adecuado para una persona puede no serlo para otra, al ser distintos sus gustos, necesidades, sobrepeso, edad, etc.