¡Hola! ¿Qué tal? El verano se acerca y, con él, una de nuestras mayores preocupaciones: que vuelva el dolor de piernas por el cansancio y la temperatura. ¡Este año estamos aún a tiempo de evitarlo! Descubramos juntos cómo evitar las piernas pesadas en verano.
El verano ya está aquí y, para millones de españoles, el verano rima con tobillos hinchados y piernas pesadas… Por eso, en nuestro post de hoy hemos pensado darte 10 consejos para mantener las piernas ligeras y disfrutar del período estival. ¿Las vemos?
1. Alimentarse de los colores del verano
Las fruterías y supermercados están repletos de frutas y verduras ricas en antioxidantes: aprovéchalos para proteger las paredes venosas. ¿Dónde encontrarlos? Los antioxidantes están presentes en numerosos alimentos: pimientos, fresas, tomates, cítricos, etc. Y para sazonar las ensaladas, podemos elegir aceite de oliva, aceite de semilla de uva o nueces, todos ellos ricos en vitamina E.
No podemos olvidarnos de las proteínas presentes en el marisco, la carne o el huevo, que permiten preservar la masa muscular, fundamental para el funcionamiento del sistema venoso.
Por otro lado, un punto clave es disminuir, en la medida de lo posible, el consumo de grasa y sal.
2. Beber agua
Para favorecer el drenaje tisular, recuerda hidratarte con regularidad: 1,5 litros diarios de agua es la cantidad mínima recomendada. Para asegurarte de que alcanzas este mínimo, puedes tener siempre a to alcance, en la mesa de la oficina o en el bolso, una botellita.
3. Moverse mucho
Aprovecha el frescor mañanero para ir al trabajo andando o bájate una parada antes de metro o autobús y realiza el último trayecto andando. La bicicleta es también muy recomendable ya que el movimiento de pedaleo estimula la contracción regular de los músculos de la pierna. Lo ideal sería completar estas actividades con una sesión de natación o de gimnasio semanal.
4. Cuidado con los viajes
El verano es una época de viajes… Si vas a realizar un viaje largo en avión, autobús o tren, evita permanecer mucho tiempo inmóvil. Levántate cada cierto tiempo para estirar las piernas y dar un paseo. También, mientras estés sentado, puedes realizar pequeños movimientos de flexión-extensión de los pies.
5. Adiós al vuelta y vuelta al sol
Ponerse moreno es un deporte de riesgo para tus piernas. La exposición prolongada al sol puede ser nuestro verdadero enemigo. Las venas se dilatan y las válvulas no pueden asegurar un funcionamiento correcto de bombeo. Resultado: la sangre se estanca, las piernas y tobillos se hinchan, etc. No hace falta que te prives de la playa, pero combínalo con baño regulares y paseos por la orilla.
6. Viva las duchas frías y los masajes
Poner las piernas bajo un chorro de agua fría estimula la circulación. Por eso, prueba a finalizar tu ducha diaria con un chorro frío. Además, los masajes de piernas en el sentido del retorno venoso, es decir, desde el tobillo hacia la rodilla, pueden ayudarnos muchísimo. Para facilitar el masaje, puedes ayudarte de geles o cremas que produzcan sensación de frío y relajo.
7. Renunciar a la cera caliente
Aunque cada día menos mujeres recurren a la cera caliente para disfrutar de unas piernas depiladas, esta técnica debe ser proscrita ya que el calor dilata los vasos sanguíneos dificultando en retorno venoso. Mejor recurrir a las cremas depilatorias o al tradicional cuchilla. ¿Y qué pasa con la depilación láser? Aunque hay que estudiar cada caso de forma personalizada, en un principio no habría problema en hacerse la depilación láser, ya que son tres o cuatro sesiones al año y la intensidad de calor tiene una incidencia mínima a nivel vascular, pero como he dicho, hay que estudiar cada caso.
8. Usar ropa amplia
Evita a toda costa la ropa que comprima las pantorrillas o que aprieten a nivel de cintura. Mejor recurre a sandalias o chanclas y evita comprimir los pies con zapatos de tacón alto (nunca utilizar tacón de más de 2 cms) que dificultan el mecanismo de bombeo plantar.
9. No te olvides de los venotónicos
Si habitualmente tomas venotónicos no es momento de parar o relajarse. Estos medicamentos realizan una acción anti-inflamatoria, estimulan el tono venoso y protegen las células que tapizan el interior de las venas. Normalmente, se prescriben en periodos de 3 meses y reducen eficazmente la sensación de piernas cansadas.
10. Visita un especialista
Si estas medidas son insuficientes, no dejes que las molestias y el dolor afecten a tu vida diaria, y acude a un especialista. La insuficiencia venosa es una auténtica enfermedad que no debemos tomarnos a la ligera para evitar complicaciones. Si este es tu caso, no dudes en contarnos tu caso en tu próxima cita y te aconsejaremos en todos los pasos. ¡La cita es gratis y sin compromiso! Puedes pedirla rellenando el siguiente formulario:
Esperamos que te haya sido útil nuestro post y ya tengas una idea de cómo evitar las piernas pesadas en verano. ¡Gracias por leernos y hasta la próxima!
